¿Qué tan caro es comer fuera en Islandia? Vamos a echar un vistazo
Islandia es un país que puede sorprender en muchos aspectos, tanto por sus paisajes como por… los precios en los restaurantes. ¿Te has preguntado alguna vez por qué una cena en Reykjavik puede costar más que unas vacaciones en el Báltico? Pues bien, siéntate cómodo, porque la respuesta no es sencilla. Pero oye, ¿quién dijo que viajar es solo relajarse? Te contaré por qué el menú islandés puede acelerar tu pulso, y no precisamente por los platos picantes. Pero no te preocupes, también tengo algunos consejos para ahorrarte unas cuantas coronas.
El costo de vida en Islandia – ¿cómo afectan los precios de los restaurantes?
Imagínate esto: estás en un país con solo 350 mil habitantes. No suena como un problema, ¿verdad? Pero ahora piensa en que todo lo que comes, desde aguacates hasta carne de res, tiene que ser traído desde lejos. Y no, no hablo de un viaje desde el supermercado cercano. En Islandia, aunque cultivan tomates y pepinos en invernaderos con lámparas especiales, sigue siendo solo una gota en el océano de las necesidades. La mayoría de los alimentos que llegan a los restaurantes son importados, y eso cuesta… y mucho. Por eso, a veces es mejor comerse un bocadillo de queso que una comida de tres platos. Pero esto es Islandia, así que quizás valga la pena probar algo más.
Y ahora un momento para reflexionar: los impuestos. ¿Sabes esas molestas cantidades que aparecen en los recibos? Islandia tiene uno de los IVA más altos de Europa, con alrededor del 24%. Y sí, adivinaste, es otra razón por la que la cuenta en un restaurante islandés puede causar mareo. Los restauranteros deben cubrir esos impuestos, y nosotros, los pobres turistas, pagamos más. Es como si pagaras una entrada extra al museo, pero en su lugar, por tu cena. ¡Ah, las maravillas de viajar!
¿Salario mínimo alto = hamburguesas más caras?
De acuerdo, tal vez pienses: «¿Qué tiene que ver el salario con mi hamburguesa?». Pues más de lo que crees. En Islandia, el salario mínimo es de aproximadamente 350,000 ISK, que equivale a unos 2,400 euros al mes. Nada mal, ¿verdad? El problema es que cada empleado, desde el camarero hasta el chef, debe ganar esa cantidad. ¿Y quién paga por eso? ¡Exacto, tú! Así que, la próxima vez que veas 15,000 ISK (alrededor de 100 euros) en tu cuenta, recuerda que estás apoyando la economía local y el esfuerzo de todas esas personas que trabajan para que puedas comerte esa hamburguesa.
En comparación, en otros países europeos los costos laborales en la gastronomía son mucho más bajos, lo que hace que comer fuera sea más barato. Pero Islandia es una historia completamente diferente, y por eso los precios aquí son tan altos. Claro, podría decir que es el único obstáculo, pero no sería yo si no añadiera algunas otras «atracciones».
¿Cómo no arruinarse comiendo en Islandia?
Tranquilo, hay formas de sobrevivir a la aventura culinaria en Islandia sin quedarte sin dinero. Solo necesitas saber dónde buscar. Empieza con el «plato del día». Lo sé, lo sé, suena aburrido, pero en Islandia puede ser tu salvación. Muchos restaurantes y cafeterías ofrecen menús diarios a precios más bajos. Y si tienes suerte, fuera de la temporada turística encontrarás muchas ofertas. ¿Quién lo diría? ¡El paraíso para los amantes de la sopa de pescado puede ser tan generoso!
Además, vale la pena prestar atención a los productos locales. ¿Pescado islandés? ¡Genial! ¿Cordero? Uno de los mejores del mundo. Si renuncias a los productos importados a favor de lo que crece y nada alrededor de Islandia, puedes ahorrar un poco de dinero. Ah, y no te olvides de los perritos calientes. En serio, ¡los perritos calientes islandeses son una verdadera leyenda! Para algo que cuesta menos que un café, es probablemente la mejor inversión de tu vida.
- Pide el plato del día – ¡realmente funciona!
- Aprovecha las ofertas – busca promociones en las cafeterías
- Elige productos locales – pescado, cordero, esas cosas
- Evita las trampas turísticas – en serio, esos lugares son como cajeros automáticos para los restauranteros
La cocina islandesa – ¿qué vale la pena probar?
Si decides invertir en una buena cena, te recomiendo los clásicos. Empieza con «ktofiski», que es pescado seco. Suena raro, pero los islandeses lo adoran, y si ellos lo adoran, tal vez deberías darle una oportunidad. El cordero es otro imprescindible. De verdad, no encontrarás mejor cordero en ningún otro país. Y luego, la sopa de pescado – perfecta para una fría noche islandesa. Aunque los precios son altos, la calidad de los productos seguramente no te decepcionará.
Los islandeses no bromean cuando se trata de comida. Sus platos tradicionales se preparan con ingredientes de la más alta calidad, y la cocina de este país es un verdadero festín para el paladar. Así que tal vez valga la pena gastar unas cuantas coronas adicionales para experimentar la cocina islandesa en todo su esplendor. Quizás al volver a casa tengas que apretarte el cinturón un poco, pero los recuerdos no tienen precio, ¿verdad?
¿Es caro comer en restaurantes en Islandia?
Islandia – el país del hielo, el fuego y… ¿facturas absurdas por una cena? Pues bien, no te voy a mentir, barato no es. Una vez, sentado en Reykjavik, pagué por una hamburguesa lo mismo que cuesta un buen par de zapatos. Pero te diré algo: valió la pena. Además, imagínate esta escena: estás sentado en un restaurante con vistas a un volcán, bebiendo un café (por el que podrías haber comprado medio supermercado en España), pero esa sensación… no tiene precio. Los precios de una comida pueden oscilar entre los 30 y 90 euros, dependiendo de si te sientas en un restaurante en el centro de Reykjavik o eliges opciones más locales. ¿Y qué hay de la comida rápida? Bueno, incluso una hamburguesa en Islandia tiene su precio, y es más alto que en la mayoría de las ciudades europeas.
El costo del alquiler influye en los precios de los restaurantes
Y de dónde salen esos precios astronómicos? La respuesta es sencilla: los alquileres. Alquilar un local en el centro de Reykjavik cuesta tanto que los dueños tienen que subir los precios para salir adelante. Tuve la oportunidad de hablar con el gerente de uno de los lugares más populares, y me dijo que a veces se pregunta si no debería vender hamburguesas al peso de oro. Y aunque el centro es caro, en las afueras de la ciudad puedes encontrar algo más asequible, aunque… no será el precio que ves en un bar de comidas español. También vale la pena considerar reservar comidas con antelación; a veces eso puede salvar tu cartera.
Comer fuera versus cocinar en casa
Y ahora hablemos de la opción que puede salvar tu presupuesto en Islandia: cocinar. Sí, lo sé, viajar no es el momento para estar en la cocina, pero te digo por experiencia que hacer compras en el supermercado y cocinar en un apartamento alquilado puede ser la clave para sobrevivir en esta cara isla. ¿Los precios en las tiendas? Más altos que en España, pero aún más razonables que la cuenta en un restaurante. Te lo digo: tener a mano pan, mantequilla y queso local puede ser tu mejor amigo. Y si además logras encontrar algo fresco en el mercado local, ¡ya eres todo un maestro del ahorro!
¿Vale la pena probar productos locales?
Y ahora la joya: las especialidades islandesas. En serio, la primera vez que probé tiburón fermentado, quise salir del restaurante de espaldas. Pero, como dicen, ¡cada país con sus costumbres! Islandia es un paraíso para los amantes del pescado y el cordero, ¿y esos pescados recién capturados? Una maravilla. Claro, una comida de platos tradicionales puede costar entre 40 y 120 euros, pero la experiencia sabe mejor que el dinero (o al menos así me lo explico yo mismo). En muchos restaurantes ofrecen ingredientes de temporada, así que vale la pena lanzarse a algo que no comerás en ningún otro lugar del mundo. Solo se vive una vez, ¿verdad?
¿Qué opciones más económicas hay en Islandia?
Bueno, ahora algo para los viajeros astutos. Si no quieres gastar una fortuna en cada cena, tengo algunos trucos para ti. Primero – los food trucks. ¡Los food trucks islandeses son oro puro! Por 12-18 euros puedes comer una hamburguesa sólida, un perrito caliente o fish and chips. Y si quieres recortar aún más los costos, visita los supermercados. Allí encontrarás sándwiches y ensaladas preparados que te salvarán de la bancarrota. Y recuerda, las promociones de almuerzo son algo que realmente vale la pena seguir. Algunos restaurantes ofrecen menús más económicos al mediodía, una excelente opción si no quieres gastar demasiado en la cena.
El costo de las bebidas y el alcohol en los restaurantes
Las bebidas – una verdadera trampa en Islandia. ¿Cerveza por 15 euros? No es una broma. ¿Vino? Ya puedes empezar a calcular cuánto podrías comprar en España con ese dinero. Por supuesto, puedes intentar limitar estos gastos comprando alcohol en el duty-free del aeropuerto o en tiendas especializadas. Por cierto, es interesante saber que el consumo de alcohol en lugares públicos en Islandia está regulado, por lo que los restaurantes tienen el monopolio de las bebidas alcohólicas caras. ¿Eso significa que deberías renunciar por completo a ellas? Tal vez no, pero vale la pena pensarlo para no quemar todo tu presupuesto en bebidas.
¿Vale la pena planificar las comidas con antelación?
Y ahora el mejor consejo que puedo darte: ¡planea, planea y vuelve a planear! Islandia no es el lugar para entrar espontáneamente en el primer restaurante que encuentres. Reservar una mesa con antelación no solo puede ayudarte a evitar costos inesperados, sino que a veces puedes encontrar promociones para quienes reservan con anticipación. Y esos eventos culinarios – ¡un verdadero paraíso para los gourmets! Recuerda también alternar opciones: un día en restaurante, otro día cocinando en el apartamento. Ese equilibrio te ayudará a controlar los gastos mientras disfrutas de los mejores sabores de Islandia sin necesidad de pedir un préstamo.